12 Julio - Proverbios 8:13-14
El temor de Jehová es aborrecer el mal; la soberbia y la arrogancia, el mal camino, y la boca perversa, aborrezco.
Conmigo está el consejo y el buen juicio; Yo soy la inteligencia; mío es el poder.
-Desechando cosas y adquiriendo otras:
¿Qué es temer a Dios? Esta pregunta que nos hemos hecho muchas veces, significa respetarle, amarle, ponerle en su lugar. Para ello, tenemos que desprendernos de todo aquello que es malo para nosotros y nuestra relación con Él.
Pero el texto, da un paso más al decir que no solo es apartarnos del mal, sino aborrecerlo no querer verlo más, es desprenderse de tal forma que decidamos que eso no tiene lugar en nuestra vida.
Es así como tenemos que aborrecer el mal.
Nos habla en concreto de la soberbia y la arrogancia que es pretender que nosotros tenemos la razón, por encima de todos e incluso de Dios. Para poder combatirlo, es imprescindible tener la actitud que se nos presenta Romanos 12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Nuestro criterio debe acoplarse a Dios y no Dios o los demás al nuestro.
Esto, junto con el mal camino y la perversión, es algo que Dios no lo puede ni ver.
¿Somos conscientes de ello?
Dios no solo es nuestro guía y consejero, es el Mejor Guía y el Mejor Consejero que puede haber. Él tiene el juicio, la inteligencia y todo el poder. ¿Nos pondremos cada día y de forma autentica y genuina en sus manos o solo según nuestro criterio que es limitado?
Cada uno de nosotros tiene el control sobre su vida, en ti está el tomarlo y cerdeárselo a Dios, o acoplarnos a este mundo y ser como uno más sin acogerse a la ayuda y dirección de Dios.
Dios te bendiga. Amén.
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