31 Octubre - Isaías 48:17-19
Así ha dicho Jehová, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo soy Jehová Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir. ¡Oh, si hubieras atendido a mis mandamientos! Fuera entonces tu paz como un río, y tu justicia como las ondas del mar. Fuera como la arena tu descendencia, y los renuevos de tus entrañas como los granos de arena; nunca su nombre sería cortado, ni raído de mi presencia.
-Dios nos encamina:
Dios nos enseña provechosamente, esto es, que lo que nos dice es para nuestro provecho y nuestro bien. Pero va más allá, nos encamina por el camino a seguir, nos indica y abre nuestro camino.
Al completar la lectura vemos que Dios les dice: ¡Oh, si hubieras atendido a mis mandamientos! Esto es una promesa y una esperanza para nosotros, Dios quiere guiarnos y quiere enseñarnos la senda para que nos vaya bien y esto es bueno, pero hay un problema, si leemos detenidamente vemos que dice: si hubieras atendido.
¿Qué? ¿Cómo? ¿Qué quiere decir esto? Podemos oír y no atender, o escuchar sin prestar atención. Aquí está la clave, yo quiero saber su voluntad, pero he de estar atento a lo que Dios me dice, para que pueda llevarla a cabo. Dios te va a enseñar provechosamente en cada situación, tenlo por seguro, pero tu parte es buscar y escuchar diligentemente. El Salmo 16:11 dice: Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre.
Dios te va a dirigir en todo, acude a Él expectante, sabiendo que de seguro será así cada día en tu vida.
Dios te bendiga. Amén
Suscríbase a nuestro canal en Youtube:
https://www.youtube.com/channel/UCKZXZxw9mlNxWkalHgbFIHQ