8 Enero - Juan 6:27
Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre.
-Nuestras prioridades.
Hace tiempo me contaron, de como en China, el partido comunista había solicitado a sus afiliados que si alguno tenía dos viviendas, cediese una para el partido; todos asintieron unánimes. Lo mismo hicieron cuando se solicitó que el que tuviese dos automóviles o dos motocicletas, hiciese lo mismo. La cosa cambió, cuando se solicitó que quien tuviese dos bicicletas diese una para el partido, entonces ya nadie levanto la mano y nadie quería. ¿Qué había cambiado? Simplemente que nadie tenía dos viviendas, ni dos automóviles, ni dos motocicletas pero la mayoría sí que tenía dos bicicletas. ¿Qué aprendemos de esto? Es muy fácil dar cuando no se tiene, pero cuando se tiene o se puede, la cosa cambia.
A lo largo de la vida, he visto a muchas personas que estarían dispuestas incluso a dar la vida por el Señor, pero cuando se les pide que vengan a hacer algo en la Iglesia, o que ayuden a alguien, nunca tienen tiempo.
EL texto de hoy dice: Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece.
¿Por qué clase de comida estamos trabajando? ¿Cuál es nuestra real y verdadera prioridad?
Mateo 6:33 dice: Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
¿Lo hacemos? ¿Cuál es nuestra prioridad? ¿Estamos dispuestos a ser fieles en lo poco para que Dios nos ponga en lo mucho? depende de cada uno nosotros. ¡Cómo me alegraría que el Señor nos dijese a todos nosotros como en la parábola de los talentos en Mateo 25:23 donde dice: Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor!
¡Que así sea en tu vida! Dios te bendiga. Amén.
Suscríbase a nuestro canal en Youtube:
https://www.youtube.com/channel/UCKZXZxw9mlNxWkalHgbFIHQ
No hay comentarios:
Publicar un comentario