19 junio - 2ª Reyes 6:15-17
Y se levantó de mañana y salió el que servía al varón de Dios, y
he aquí el ejército que tenía sitiada la ciudad, con gente de a caballo y
carros. Entonces su criado le dijo: ¡Ah, señor mío! ¿Qué haremos?
he aquí el ejército que tenía sitiada la ciudad, con gente de a caballo y
carros. Entonces su criado le dijo: ¡Ah, señor mío! ¿Qué haremos?
Él le dijo: No tengas miedo, porque más son los que están con
nosotros que los que están con ellos.
nosotros que los que están con ellos.
Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para
que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el
monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de
Eliseo.
que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el
monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de
Eliseo.
-Vista limitada:
Cuando el siervo de Eliseo se levantó
de mañana vio un gran problema: Un ejército rodeando la ciudad.
de mañana vio un gran problema: Un ejército rodeando la ciudad.
Pero cuál no sería su sorpresa cuando
en medio de su angustia Eliseo estaba tranquilo.
en medio de su angustia Eliseo estaba tranquilo.
¿Qué ocurría? ¿No era consciente del
peligro Eliseo? Nada más lejos de la realidad.
peligro Eliseo? Nada más lejos de la realidad.
Eliseo veía igual que el a los soldados
que tenían sitiada la ciudad, pero Dios le había dado el privilegio de poder ver
algo que no veía su siervo: La provisión y escudo divinos.
que tenían sitiada la ciudad, pero Dios le había dado el privilegio de poder ver
algo que no veía su siervo: La provisión y escudo divinos.
¿Vemos solo el problema? Oremos como lo
hizo Eliseo para que nuestros ojos sean abiertos y veamos el poder de Dios. Él llega
a donde nosotros jamás podríamos llegar. Que Dios abra tus ojos para ver su
provisión. Dios te bendiga. Amén.
hizo Eliseo para que nuestros ojos sean abiertos y veamos el poder de Dios. Él llega
a donde nosotros jamás podríamos llegar. Que Dios abra tus ojos para ver su
provisión. Dios te bendiga. Amén.
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